sábado, 8 de abril de 2017

Colección de cuentos por Maria Fernanda Rueda Prada

Terremoto en un lugar inexistente
Primer día I

Estaba con mi Hermano gemelo alistando las cosas para salir de viaje el día siguiente. Era Sábado y la siguiente semana seria Semana Santa  así que mas alegría  para mi el no tener que ir hasta dentro de una semana a esa cárcel del demonio la cual llamaban escuela. Iríamos a Santiago de Chile para comprar algo de ropa y tal vez ver una película en cine.

Estábamos terminando de empacar cuando el celular de mi hermano Mat sonó

-Hola?... Hola ma! que pasa, como les esta va en Santiago... aja... si.... que dices, Terremoto? pero si haca no ha venido uno desde que tu eras niña... pero... si, ya le digo a mi hermana... si... si... Si ya pero no desespere... ok, chao ma, te queremos.

Mi hermano colgó el celular y con una risa en los labios empezó a hablar y burlarse de lo que nos había advertido mamá.

-Su, mamá que estemos pendientes de todo y nos pongamos ropa para salir rápido que alguien le dijo que estamos en riesgo de terremoto.

-Es enserio, terremoto? por estos lados? en este pueblo? Ja si claro, primero me caso yo a que ocurra un terremoto en este lugar. Aquí solo hay temblores, que exagerada.

-Cierto?, es absurdo, hace mucho que no ha terremotos por estos lados, no puedo creer que se deje engañar de esta forma 

Le di un pequeño golpe en el hombro a mi hermano y él me levanto, para luego darme un par de vueltas y tirarme en la cama.

-Si... que tonto... sientes eso?

Me estaba empezando a poner algo nerviosa ya que sentía como que la cama se empezaba a mover un poco. Trate de decirme a mí misma que era mi imaginación, pero  luego vi el candelabro del pasillo moverse también.

- Que cosa?

-Se esta moviendo la cama, que no lo sientes?

-Claro que o se esta moviendo la cama,solo estas un poco mareada, eso es todo.

-Pero, y el candelabro?

-Lo mismo, relájate hermanita, o a caso crees e las paranoias de nuestra madre..

Me quede pensando un momento -Mamá me hizo ir a un psicólogo porque pensaba que yo era anorexica, solo porque estaba algo delgada y me había enfermado del estómago, por lo que no quería comer, y a mi hermano le acuso de drogadicto cuando llegó una vez conmigo a casa con los ojos rojos porque le dio alergia y no paraba de rascarse- Pero que se le podía hacer, ese es el precio de tener una madre soltera y con diagnósticos de esquizofrenia.

-Es verdad - le respondí con una sonrisa algo nerviosa

Empezamos a jugar en el PS4 y íe repente se fue la luz.

-Mieeeeeercoles.

-Y ahora que hacemos?

- No lo se... Ahg, en estos momento me gustaría ser David, él tiene una planta y un hotel completo solo para el.

-Cierto...

Volví a ver que el candelabro se movía, pero esta vez con más fuerza, mucha, tanto que parecía como si fuera a salir impulsado. Mat también se dio cuenta de ello y empezó a preocuparse.

-Q-Que está pasando.

-No lo se, tal vez sea un temblor, ya sabes como es Chile.

-No se Mat, tengo miedo...

-No te preocupes Su, todo estará bi... SUSAN DEBAJO DE LA CAMA!

A la velocidad de la luz Mat se metió debajo de mi cama llevándose conmigo una almohada. Segundos después la enorme ventana con vista a toda la ciudad explotó, haciendo volar pedazos de vidrios por todos lados. El suelo no dejaba de moverse caían pequeños pedazos de escombros por todos lados. De pronto escuche que algo romperse y sin previo aviso el edificio se partió ar en dos haciendo que nos deslizamos hacia la pared con fuerza, por  suerte reaccione rápido y puse mi almohada en la pared para que ni mi hermano ni yo nos fractremos. Luego cerré los ojos del susto y me desmalle. 

(...)

Abrí mis ojos y Mat me estaba abrazando mientras lloraba y maldecía el no haberle hecho caso a mamá.

-Lo siento Su, lo siento tanto, no te mueras por favor, eres mi mejor amiga no me dejes. Soy un completo idiota por no hacerle caso a mamá, perdóname por favor.

-Mat?

-SUSAN!

Me abrazo aun mas fuerte, parecía que no me hubiera visto en años. Su cabeza sangraba un poco, pero al parecer eso era lo que  menos le importaba en ese momento.

-Mat, tu cabeza...

-No importa- Seco sus lagrimas y me miro a los ojos -Ahora, salgamos de aquí.

Usamos la almohada para apartar los vidrios y  escombros que habían caído para abrirnos paso,  cuando llegamos a la sala vimos que el apartamento estaba  partido por la mitad como lo había predicho antes de desmayarme, y con mucho cuidado bajamos por la pequeña pila de escombros que había quedado.

Al llegar a las calles me sorprendió y abrumador ver todo lo que estaba pasando. Carros de bomberos, policías, heridos y personas pidiendo ayuda por todos lados, ademas de cadáveres de personas que conocía, entre ellos, David, mi mejor amigo del instituto y el chico que me gustaba y el cual me le iba a declarar mañana en el colegio. Eramos amigos desde que llegue a Chile hace un año... y ahora... se ha ido

Me solté a llorar hasta que se me acabaron las lágrimas, por David, por mamá, por los vecinos y porque me estaba dando un ataque de histeria horrible. Mi hermano me abrazo y dejo que llorara en su hombro hasta que me cansara, el era la única persona de confianza que me quedaba, y lo único que podríamos hacer era buscar refugio para poder dormir esta noche y ver como sobreviviríamos a esta.

(...)

Llego la noche y decidimos buscar a alguien conocido para ver si nos ayudaba con posada y algo de comer. Después de tanto divagar por nuestro barrio encontramos a un grupo de personas misericordiosas que nos dijeron que podíamos quedarnos con ellos hasta que todo esto pasara. Mi hermano y yo dormimos en una colchoneta en el piso y los hombres  mas fuertes del grupo se quedaron haciendo guardia.

-Estos días son demasiado peligrosos ya que a las personas se les ocurre que este es el mejor momento para robar  medicamentos, comida, y cosas materiales.

Adriana, una  chica de mas o menos 15 o 16 años de edad nos contó que cuando tenia 7 años ocurrió un terremoto parecido a este y su padre tuvo que hacer guardia para que no robaran nada.

-NUNCA HAN VIVIDO UN TERREMOTO!

-No, la verdad e que no. Le dije algo tímida ya que no era buena para hablar con personas

-Venimos de Colombia, allí o ocurren terremotos, y menos en la zona donde vivíamos, pero nuestra madre si. Respondió mi hermano algo sorprendido por historia

-Entiendo. Bueno duerman, mañana sera un día duro

Y luego de eso me acosté al lado de mi hermano, abrace ala almohada que traía desde mi casa y me quede dormida.

Ese fue el día en donde la tortura comienzo, una tortura que duraría un mes completo.

...Un mes que nunca olvidaré...

Cuento creado por: Maria Fernanda Rueda Prada 8-1                                                                            2017




EL PASADO EN SANGRE
II

Me levantè de mi cama demasiado confundida, luego recordé todo por lo que había pasado. Me sentí algo mareada así que decidí ir a pedirle algo de comida a Adriana y su madre y Teresa, ellas son muy buenas conmigo. Desayune como Dios manda y me encamine por las calles de mi destronada y pequeña ciudad.

La ciudad estaba todavía ajetreada, con policías y médicos sacando cuerpos y sobreviviente de cuanto escombro encontraban. Pensé en cómo estarían de arruinadas las zonas costeras y en las miles de familias que ahora estarían sufriendo por la pérdida de sus seres queridos.

Cerca de mi barrio me encontré con mi destruido colegio. Cualquier niño desearía que el colegio fuese destruido por una bomba atómica, un meteorito misterioso, un terremoto junto a un tsunami o al menos un paro de profesores,pero cuando lo vives en primera persona deseas el jamás haber dicho eso, NUNCA.

Me senté en una banca que quedaba en frente de mi arruinado colegio y empecé a recordar cuando  llegué por primera vez, ya hace un año que entre en este país por locuras de mi mamá... y lo más divertido es que era la mejor decisión que que había tomado en años. A mi hermano y a mi nos pusieron en el mismo salon, no sabían que nosotros juntos éramos dos diablos en carne propia. Al entrar nos presentaron a todo el salon y nos sentamos en los puestos del fondo. Todo era tranquilo ya que no queríamos causar mala impresión (no por ahora) yo estaba en la esquina y Mat en frente de mí, íbamos unos temas más adelantados en nuestra antigua escuela, así que prestar atención no era exactamente lo que hacíamos en el salon.

Seguí caminando alrededor de la escuela hasta que decidí entrar a lo que quedaba de ella. Los pasillos ya no estaban y quedaban solo algunas paredes con mensajes que alentaban a el buen comportamiento en las aulas de clases, no al embarazo a temprana edad, responsabilidad con el estudo, cosas por ese estilo. Al pasar por ahí me acorde de como nos volábamos de clases Marco, Juan, Karly, David, Mat y yo. Eso y fue dos meses después de llegar y acomodarnos, como ya lo había dicho, éramos un desastre, buenos estudiantes, pero desastres. No del tipo que insulta a los profesores o se la pasas peleando o molestando a estudiantes, eramos mas de los indisciplinados del salon, los payasos o algo por el estilo. No dejabamos dictar clases, y vivíamos fuera de salon, pero cuando nos preguntaban cómo íbamos en materias, primeros puestos, mejores calificaciones, notas perfectas, etc. Corríamos como locos por todos lados gritando y molestando a los otros profesores para luego llegar a las aulas de los menores o transición. Nos sentábamos cerca de los niños y empezamos a jugar con ellos, no me llevaba mal con las profesoras de estos grados, nos querían bastante y le colaboramos con los niños cuando eran muy insoportables. luego de eso salimos a descanso y volvíamos a entrar a clases hasta que nos aburrimos y volviamos a salirnos.

Caminé por el patio y luego la cancha donde soliamos hacer educación física, jugar baloncesto y cosas por el estilo, Mat y yo era muy bueno con el baloncesto, solo que el lo practicaba más, yo prefería tocar el piano y cantar, eso era  más tranquilizante que correr por una cancha quitándole un balón a otra persona para luego meterlo en una cesta y empezar todo de nuevo.

Cuando me di cuenta estaba sentada en la mitad de la cancha recordando todos los partidos jugados con mis amigos. Me acosté y mire al cielo como las nubes formaban figuras, tal como lo hacíamos ante de toda esta tragedia.

De pronto sentí como todo empezó a temblar y las paredes se derrumban poco a poco. Salí corriendo del lugar con miedo a que me cayera algo encima, por en medio de unas palmeras había un camino que usaba para salir de colegio en secreto que daba a con las calles de mi ciudad. me metí rápido, entre la pared con miedo a que algo me tapara la salida, pero nada lo hizo y salí de una vez. En la calle busque un lugar despejado donde fuera seguro.

En la calle me encontré a mi hermano preocupado y gritando mi nombre por todos lados, se veía que había corrido por todos lados, sus mejillas estaban rojas como cuando jugaba en el equipo de baloncesto y tenía una cara de angustia que se notaba a kilómetros.

-HERMANO, AQUÍ-

 Grité entre la multitud mientras saltaba para que me viera, las desventajas de ser bajita.
Al verme empezó a correr hasta que llegó en frente de mi esquivando a un montón de personas.

-Dios, donde estabas Su, me tenias demasiado preocupada!- 

-Lo siento brother, estaba en el insti cuando todo empezó a temblar y me tocó salir por el camino secreto, enserio lo siento-

- Nunca te me vuelvas a perder si?! mamá me mataría si te pasa algo, en serio-

-Ya ya, nunca lo volveré a hacer, lo prometo-

-Lo digo de verdad, esfuérzate en prometerlo!-

- Lo prometo, no te pongas nervioso-

-MAT!-

A lo lejos se escuchó la voz de un chico que no conocía, era más alto que nosotros y parecía también un año mayor y vena junto a Adriana y otra chica más, todos corriendo hacia nosotros.

-GOMEZ, ADRIANA, MAJO AQUÍ-

Los chicos llegaron y me saludaron.

-Mi madre los estaba buscando, donde te metiste Susana-

-Tranqui Adri, ya estoy aquí, no te preocupes-

-Cómo puedes actuar tan tranquila en una situación así?!-

-La verdad es que no lo se...

-Bueno-

El chico alto habló, tenía una voz algo gruesa, pero no parecía nada intimidante.

-Debemos volver con la señora Teresa, posiblemente esta que no puede mas del miedo-

-Okey Gómez, y por cierto, ella es mi hermana menor por unos segundos. Su el es Gomez, lo conocí hoy, va n el mismo grado que adriana-

-Un gusto chica, ahora vamos-

al llegar a el barrio que nos habíamos tomado tenia demasiada hambre, no había comido nada así que lo que nos dieron me lo comí de un bocado.

Al llegar la hora de dormir me acosté cerca de mi hermano y le dije "me cae bien ese chico, cuidalo" luego y luego me acosté a dormir, el se quedo en shock y luego se acostó para dormirse.

Cuento creado por: Maria Fernanda Rueda Prada 8-1                                                                       2017








2 comentarios:

  1. Qué Pasó Mafe. Te faltaron 8 cuentos, es decir la tarea de 8 semanas. Pilaaaaaasssss el próximo periodo.

    ResponderEliminar
  2. Los textos presentados son muy buenos, lástima que perdieras el hilo.

    ResponderEliminar